Ya sea para verse y sentirse de la mejor manera posible para estos eventos sociales o para recuperarse a tiempo para el verano, esta suele ser la época más demandada para la cirugía.
La temporada navideña significa muchas cosas. Es una época de reencuentros, vacaciones, quedadas con los amigos, cenas, fiestas…, pero también es una época ideal para la cirugía plástica.
Y es que, ya sea para verse y sentirse de la mejor manera posible para estos eventos sociales o para recuperarse a tiempo para el verano, esta suele ser la época más demandada para la cirugía.
Según la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, algunos de los procedimientos más populares durante este tiempo son los no quirúrgicos, incluidos rellenos y neuromoduladores. Los rellenos pueden restaurar el volumen perdido de las mejillas o debajo de los ojos, y rellenar los labios u otras líneas faciales profundas. Los resultados son inmediatos, con una leve hinchazón y moretones que se resuelven en pocos días.
Por otro lado, los neuromoduladores también son buenas opciones para debilitar los músculos de la expresión que causan arrugas en la piel. Estos pueden suavizar las líneas horizontales de la frente, las patas de gallo o las líneas del entrecejo. Debido al tiempo mínimo de inactividad, hinchazón y moretones, tienden a ser populares en las semanas previas a las vacaciones.
Asimismo, los láseres, tratamientos IPL y peelings químicos también son populares durante este tiempo. Con ellos se pueden abordar los problemas de pigmentos y se puede realizar un nuevo revestimiento para dejarlo con una piel fresca, suave y brillante para las vacaciones.
Por otra parte, las vacaciones navideñas son también el momento perfecto para los procedimientos quirúrgicos, ya que las personas pueden aprovechar su tiempo libre y el tiempo de inactividad en el trabajo para poder llevarlos a cabo. Y es que, estos procedimientos requieren tiempos de recuperación que pueden variar desde un par de semanas hasta un par de meses.
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