Menos inflamación, mejor evolución de las cicatrices, una recuperación más rápida y mayor tolerancia a los vendajes compresivos.
Las cirugías estéticas aumentan anualmente y refleja que la población, especialmente la femenina, está cada vez más preocupada de su aspecto físico y dispuesta a invertir en distintos tipos de procedimientos con el objetivo de retocar alguna parte de su cuerpo.
Si bien la llegada de los días de calor son los que en general impulsan la decisión de realizarse una cirugía estética para así poder lucir una mejor figura, son los meses invernales los preferidos y recomendados por los profesionales para este tipo de procedimientos debido a los beneficios que ofrecen las bajas temperaturas.
Durante el invierno, la radiación solar es más baja que en la época estival, hay más días nublados y la exposición de la piel al sol es menor porque utilizamos ropa que nos cubre una mayor superficie. Esta condición es de vital importancia para las cirugías, ya que cualquier exposición solar puede generar manchas en las cicatrices o zonas operadas, que no se borran y podrían quedar de por vida. Incluso los hematomas posteriores a una cirugía, pueden ocasionar manchas difíciles de borrar si se exponen al sol.
Pero ¿cuáles son las cirugías plásticas a las que más recurren en invierno. En esta época se realizan la mayor cantidad de intervenciones en el rostro, como rinoplastias, blefaroplastia (cirugía de párpados), lifting facial , entre otras, pero las que mayor incremento presentan, son la abdominoplastia y liposucción , que generalmente los pacientes se realizan de forma simultánea. Esto se debe a que quienes quieren mejorar la apariencia de su abdomen, optan por una liposucción para remover la grasa localizada, y una abdominoplastia para remover el exceso de piel o estirarla.
Ambos procedimientos son más recomendados en invierno, puesto que conllevan el uso de fajas o ropa compresiva durante un mes. En el verano, usar este tipo de prendas con temperaturas de 30 grados o más, es incómodo, mientras que las bajas temperaturas del invierno, hacen que la incomodidad sea menor, al igual que la inflamación . Además, el uso de ropa más holgada y gruesa en invierno, permite disimular las fajas.
A todo lo anterior, hay que agregar que la mayoría de estas cirugías requieren de un reposo de actividad deportiva de al menos tres semanas. En el invierno, las personas tienden a realizar menos actividad física. En verano, en cambio, todos quieren hacer ejercicios, van al gimnasio, salen a correr y es más difícil hacer este reposo .
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