Cada año, entre 18.000 y 19.000 españolas se someten a un aumento de mamas, lo que hace de esta intervención de cirugía estética la más demandada por las mujeres de nuestro país. La inmensa mayoría optan por la implantación de prótesis mamarias, ya que la alternativa -la implantación de grasa del propio cuerpo- apenas se utiliza con fines estéticos porque los aumentos que se obtienen con ella son menores.
Las intervenciones de aumento de mamas suelen generar numerosos interrogantes sobre sus características, los profesionales capacitados para realizarlas y las prótesis empleadas. Tales interrogantes se han incrementado en los últimos años después de hacerse público el caso de las prótesis de la marca PIP, cuya extracción fue recomendada el pasado mes de octubre por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) en coordinación con la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), tras confirmarse su carácter defectuoso y su elevada tasa de rotura.
A fin de que las pacientes que se estén planteando una intervención de aumento de mamas con prótesis recurran a ella con las mayores garantías sanitarias, esta Sociedad ha elaborado el siguiente decálogo, a través del cual les recomienda que:
- Se aseguren de que el médico responsable de la intervención cuente con la titulación oficial de Especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, solicitándole que les muestra alguna acreditación al respecto si es preciso.
- Se aseguren de que la intervención tendrá lugar en un quirófano de un centro hospitalario o una clínica con todos los recursos necesarios para afrontar cualquier emergencia.
- Se aseguren de que el cirujano solicita un estudio preoperatorio, incluyendo las pruebas radiológicas mamarias que estén indicadas en su caso.
- Se aseguren de que el cirujano les entrega para su firma un consentimiento informado antes de la intervención, que precisa de anestesia, siendo ésta general en la mayoría de los casos por la propia seguridad de la paciente.
- Valoren con el cirujano las diferentes opciones de prótesis existentes en el mercado y desconfíen de aquellas con precios comparativamente muy baratos.
- Tengan en cuenta que no existen prótesis mamarias con una durabilidad de por vida, pues todas ellas, en tanto que materiales inertes, son susceptibles de rotura o contractura (endurecimiento indeseado) como cualquier otro implante en el organismo.
- Se aseguren de que el cirujano les entrega la tarjeta de identificación de las prótesis una vez implantadas. Esta tarjeta acredita la marca y las características de dichas prótesis.
- Acudan a revisiones periódicas con su cirujano para que éste proceda al examen clínico de las prótesis, siendo recomendable que tal periodicidad sea anual.
- En caso de rotura de las prótesis, procedan a someterse a su extracción, intervención ésta que no tiene carácter de urgencia ya que dicha rotura no conlleva ningún riesgo grave para la salud de la paciente.
- No se sometan a un aumento mamario con prótesis por motivos estéticos si son menores de edad ni animen a ello a estas personas por tratarse de intervenciones quirúrgicas que requieren de la necesaria madurez psicológica de la paciente.
Fuente: clinicacastro.net